Ola invernal
La ola invernal que vivimos desde hace un par de años y que se agudizó en 2022, afecta enormemente al sector del Aguacate Hass.
Las lluvias han generado una caída de la producción de la fruta que enviamos a más de 30 destinos del mundo. Dañan frutos y hojas, e incluso, ocasionan la muerte de raíces por pudrición.
Además, el agua que baja por las laderas erosiona el suelo al lavar sus nutrientes. Con estas condiciones también se dificulta el control de plagas y la gestión de enfermedades.
Según la Unidad de Planificación Rural Agropecuaria -Upra-, el año pasado las inundaciones afectaron, por lo menos, dos millones de hectáreas sembradas.
Este desafío sumado a factores económicos como el aumento de las tasas de interés por parte del Banco de la República, el encarecimiento de insumos agrícolas, la desvalorización del peso colombiano y el aumento del dólar, presentan grandes dificultades para el sector.